Por Darío Jaramillo Agudelo
*****
Qué ternura encontrarte, viejo amor imposible,
qué dulce conocerte después de que el olvido
hizo más imposible nuestro amor imposible.
Nunca tú supiste el amor que te tuve:
entonces escuchaba con tu fantasma un vals
y conocía el asombro de mirar tus pestañas
y, sin tú darte cuenta, mi alma cabía completa
en tu labio inferior.
No creas que había fotos.
Era la presencia real que sólo poseen los amores imposibles.
Nada de esto te dije cuando me dio tanto gusto
que alguien nos presentara sin saber lo que hacía,
acercarme a tu ternura que ahora no invento.
Nada de esto te dije.
Esas ridiculeces no se dicen.
Los amores imposibles son los más ridículos amores.
Contigo no me equivoqué cuando te amaba,
pero ya no te amo.
Un beso en la mejilla.
"Volveremos a vernos".
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Pliegues
Cierro los ojos y veo tus pliegues: Los de la comisura de tu boca, los que unen tu brazo con tu antebrazo. Los de tu vientre, los que unen t...
-
Queridos amigos blogueros, mi mejor abrazo para todos. Estoy disfrutando de las tan anheladas vacaciones, pero no como tal vez ustedes se...
-
Monumento a Alfonsina Storni frente a la playa La Perla en Mar del Plata, Argentina Hace unos días mi buena amiga bonaerense Sandra , m...
No hay comentarios:
Publicar un comentario