martes, 10 de septiembre de 2013

Del Miedo

Por Montaigne en "Ensayos Escogidos"
**************
"A nada tengo tanto miedo como al miedo." 
Montaigne.

"El miedo, por lo pronto, me parece una pasión extraña. No habiendo otra más propicia, en el criterio de los médicos, para trastornar el juicio. Por lo pronto, conozco muchas gentes a las que el miedo ha llevado a la insensatez, y aun en los de cabeza más firme, cuando la pasión domina engendra graves alucinaciones.
Dejemos a un lado la opinión vulgar, para la que el miedo representa unas veces los bisabuelos que salen del sepulcro envueltos en su sudario, y otras brujos en forma de lobos; en unas ocasiones duendes, y en otras quimeras. Y detengámonos ante los soldados, a quienes el miedo parece que debía sorprender menos. (...)

El alférez del capitán Juille, al apoderarse de la plaza de Saint Pol el conde de Bures y el señor de Reu, pues, ¡poseído por un miedo desbordante! se arrojó fuera de la plaza por una cañonera y fue deshecho por los sitiadores. En el cerco de la misma fue memorable el terror que invadió, sobrecogió y heló el corazón de un noble, que cayó en tierra muerto en la lid sin haber sido herido. Terror análogo se apodera con frecuencia de una multitud. En uno de los encuentros de Germánico con los alemanes, dos gruesas columnas de ejército partieron, a causa del horror que de ellas se adueñó, por dos caminos divergentes; una huía de donde salía la otra. (...) El emperador Teófilo, en una batalla perdida contra los agarenos, quedó tan aturdido y temeroso que se vio incapacitado para huir (...)

Quienes sufrieron buen número de heridas en algún encuentro de guerra, ensangrentados todavía, es posible obligarlos a coger las armas al día siguiente; mas los que cogieron miedo al enemigo, ni siquiera vuelven a mirarlo a la cara."

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Pliegues

Cierro los ojos y veo tus pliegues: Los de la comisura de tu boca, los que unen tu brazo con tu antebrazo. Los de tu vientre, los que unen t...